El cachorro se hará sus necesidades donde no debe, lo que al principio hay que aceptar, ya que el no sabe hacerlo mejor.
Todo lo que usted puede hacer es limpiar los excrementos, eso si poco ir habituándolo con unos empapadores o papeles de periódico a hacer sus necesidades en un sitio dentro de la vivienda, y tener siempre a mano la fregona y desinfectante (nunca con amoniaco).